lunes, 12 de febrero de 2018

La Política, El Multiculturalismo Ajetreado

No podía decir nada. Me faltaba la naturalidad encubierta para poder convencerte de que la pretensión política no estaba suministrada por los eruditos. Eso, porque esgrimías nombres ficticios y alterabas mi amor para creerte y desistir de los rumores que te involucraban en hechos escandalosos.

La posta, cuando eras niño, te criaron muy mal. Tan mal que nunca pudiste entender el idioma del mundo, justo cuando te necesitaban con resto para conducirlo y guiarlo.

Eso era ego. Eso era tener ego y decirlo con temple, cómo al unísono del tiempo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario