martes, 15 de mayo de 2018

El Ayudante

¿De qué querías hablarme?, luego de haber realizado el trabajo de campo era más que evidente que el capital simbólico lo poseías vos y en sentido práctico eso te beneficiaba. De mi parte, era poco lo qué yo podía lograr en términos materiales pero la molestia pasaba por otro lado. 

Me hablaban de tus logros en el plano de la justicia y lo mucho que hacías por un mundo mejor. En comparación, yo creía todo lo contrario. No era nadie para objetartelo pero la muestra de tu altivez, me quebrantaba.

Sí supieras de infiltraciones, de grupos de tareas y hasta incluso, de escuchas ilegales, reirías de mí y capaz, entenderías del amor verdadero.

No tenías que tener lástima cuando te enterabas que nos trataban como esclavos y que obvio, era lo que merecíamos. Tenías, se supone, que tomar conciencia y dejarte de llevar por lo que decían los demás y lástima, claro, era lo que te enseñaban en la facultad.

En perjuicio, yo latía con el complejo de inferioridad.

¿ Era eso lo que no sabías?.




No hay comentarios:

Publicar un comentario