Empezaste la idea de la competitividad con los fueros del titán sumergidos en la desaparición. El tipo, los cuadros reproductivos del significante no estaban a consideración del modelo de referencia.
Y era verso. Era una química del verso y las aglutinaciones reaccionarias no podrían perdonar lo que dije y no era. La simpatía era por el gusto de Dios por la lluvia. Ni lo sabíamos.
Era rey, en su mundo apropiado.
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