sábado, 10 de noviembre de 2018

Yo, Máquina De Lluvia

Empezaste la idea de la competitividad con los fueros del titán sumergidos en la desaparición. El tipo, los cuadros reproductivos del significante no estaban a consideración del modelo de referencia.

Y era verso. Era una química del verso y las aglutinaciones  reaccionarias no podrían perdonar lo que dije y no era. La simpatía era por el gusto de Dios por la lluvia. Ni lo sabíamos.

Era rey, en su mundo apropiado. 

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